Como buenos trabajadores nos pirramos por los festivos, los fines de semana, los puentes y las vacaciones. Preferentemente en ese orden. Hoy, 1 de mayo, Día Internacional de los Trabajadores, este blog se adhiere a la sana costumbre de no pegar un palo al agua. Quizá podríamos haber escrito un texto reivindicativo o, con la que está cayendo, ponernos en plan serios. Pero preferimos limitarnos a lo más fácil, que es no hacer nada. Feliz día para todos los que todavía conserváis un trabajo y mucho ánimo a quienes bregáis cada día con ese reto que es encontrar un empleo. El viernes volveremos por nuestros fueros. Prometido.