Aunque somos sin duda ninguna carne de blockbuster, lo solemos compensar con nuestro gusto por esas películas muy a ras del suelo en las que los actores llevan el peso de la historia. La Entrega es una de esas películas. Tom Hardy, Noomi Rapace y James Gandolfini sostienen este sencillo pero poderoso film de manera impecable. Una trama mundana sobre chanchullos mafiosos que se engrandece gracias a unos personajes muy bien construidos a los que se da vida de manera solvente y sobria. Notabilísima. Y dando muestra de nuestra dualidad cinéfila, también hemos disfrutado de Kingsman: The Secret Service, con un aire de sana chirigota (sin llegar a la parodia) hacia las pelis de espías en general y Bond en particular. No deja de ser simplona en uchos aspectos, pero la acción bien llevada y el descaro general compensan de sobra. Divertida. Y acabamos con la segunda temporada de Agents of SHIELD. Una serie que ha mejorado mucho, pero que sigue muy lastrada por sus servidumbres a la construión del universo Marvel. Si lograra quitarse los complejos, dejase de marear las tramas durante capítulos y capítulos y mantuviera constante el nivel del tramo final de esta temporada, sería una serie muy recomendable. Pero todavía no lo es. Progresa adecuadamente, pero todavía no entra a la lista de imprescindibles.