Entre Cómics #67

Esta semana viene con un puñado de cómics bastante variados. El horrible evento Axis de la mano de Remender y Yu sigue su andadura por el cuarto número, y aunque mejora ostensiblemente, no está claro que vaya a ser suficiente. Entre los números uno de la semana contamos con la colección de ciencia ficción The Zoohunters, donde Peter Steigerwald nos trae una interesante historia padre-hijo en un espacio bastante pintoresco. Además arranca Death of Wolverine - The Weapon X Program, con Charles Soule y Salvador Larroca aprovechando la reciente miniserie del canadiense cabreado para proponer algo nuevo. Los números dos de la semana nos traen otra entrega de Birthright (Joshua Williamson y Andrei Bressan) y su historia de fantasía, Gotham Academy (Becky Cloonan, Brenden Fletcher y Karl Kerschl) y sus interesantes dramas de instituto y Men of Wrath (Jason Aaron y Ron Garney) cogiendo velocidad hacia el desastre bien entendido. Lo dicho, de todo un poco.

Entre Cómics #64

Tal y como avisamos, esta semana tampoco redactamos nada porque andamos locos en el trabajo. Así que marchando lista de tebeos y autores. Bueno, un apunte sí nos permitimos: Axis sigue siendo un evento de mierda en su segundo número.

- Original Sin Annual. Jason Latour y Enis Cisic. (Marvel).
- Axis #2. Rick Remender y Adam Kubert. (Marvel).
- Death of Wolverine #4. Charles Soule, Steve McNiven y Justin Ponsor. (Marvel).
- The Logan Legacy #1 (de 7). Charles Soule y Oliver Nome. (Marvel).

La Noticia Chorra de la Semana: De cómo DC deja pasar la NYCC sin decir ni pío de sus proyectos cinematográficos y a los pocos días Warner anuncia un calendario de películas hasta 2020 en una... reunión de accionistas.

Entre Cómics #59

La semana ha venido variadita, aunque ha habido mayoría de series a las que nos ha tocado seguirles el rastro. De entre las nuevas, primero hablamos de Annihilator #1 (Legendary) de Grant Morrison y Frazer Irving. Un tebeo muy bien dibujado y competentemente escrito, pero que no deja de atufar a las ideas de siempre de Grant Morrison. En cambio, el western espacial Copperhead #1 (Image) de Jay Faerber y Scott Godlewski parte de una premisa también muy sobada pero a la que imprimen personalidad y buen hacer. En los seguimientos, Dark Ages #2 de Abnett y Culbard no nos ha dado buenas razones para seguir interesándonos. En Death of Wolverine #2 McNiven vuelve a regalarnos los ojos y la historia de Soule se mantiene interesante. Hexed #2 de Michael Alan Nelson y Dan Mora para Boom! hace muchas cosas bien, pero no acaba de convencernos como una lectura obligada. Y para acabar, Imperial #2 (Image) de Steven T. Seagle y Mark Dos Santos no alcanza el nivel necesario para hacerla recomendable. Ni argumental ni artísticamente parece tener un rumbo claro y se queda corto en todos los aspectos.

Entre Cómics #58

No ha habido esta semana unanimidad a la hora de valorar el final de Original Sin. Su octavo número (en realidad toda la recta final) ha dejado bastante frío al Dr. Rust, a pesar de que Aaron y Deodato no se despegan un ápice del tono y enfoque general de los números anteriores. El Dr. Snack ha sido más benévolo en su juicio. En Cloaks #1 de Caleb Monroe y Mariano Navarro para Boom! nos encontramos con la bien narrada e ilustrada historia de un adolescente ilusionista que ejerce de Robin Hood y que va a encontrar la horma de su zapato.  Volviendo a Marvel, Charles Soule escribe con maña y Steve McNiven hace que luzca espectacular Death of Wolverine #1 (de 4). Solo por disfrutar de McNiven (coloreado por Ponsor, además) ya merece la pena. No acaba de encontrar su tono Ex-Con #1 de Duane Swierczynski y Keith Burns para Dynamite. La ambientación de finales de los 80 se queda corta y resulta irrelevante y algunos pasajes simplemente no funcionan. El planteamiento del sinestésico que puede ver las emociones tiene gancho, pero el cómic se enfoca en una historia demasiado trillada. Y acabamos con The Names #1 de peter Milligan y Leandro Fernández para Vértigo. Un tebeo que no está nada mal y que tiene sus aciertos en cuanto a historia, enfoque y dibujo, pero con solo un número no queda muy claro si juega a la baraja de la viuda de armas tomar que quiere venganza o la de la organización clandestina superpoderosa a la que todavía no sabes que te estás enfrentando. Veremos.