Ahí viene, ya se acerca, la película del reparto monstruoso, la historia obligatoria de los X-Men hecha cine. Con todos los actores, con todos los personajes, hasta por duplicado si hiciese falta. Y la verdad es que parece hacer falta oiga, porque tiene una pinta bastante del montón. Jamás pensé que si algún día se adaptaban esos dos números de Uncanny X-Men, esa historia fantástica de Claremont y Byrne, el tráiler me iba a dejar tan frío. No es que tenga mala pinta (bueno, los centinelas un poco sí) o que hayan cambiado el papel protagonista de Kitty Pryde por más Lobezno (bueno, un poco también), sino la sensación general de desidia que me transmite el chorreo de personajes con poco que contar. Espero que al menos la película sea ágil, tenga buen ritmo y permita un festival de mutantes repartiendo leña. Así las palomitas no me las quita nadie.
Este fin de semana nos trae unas cuantas películas interesantes que... bueno, a quien quiero engañar. Yo voy a ver al Captain Motherfucking America, y vosotros también deberíais. Captain. Motherfucking. America. Hombre ya, que tiene buena pinta.