Tras el paréntesis de la semana pasada, retornamos a las nuevas colecciones y a los números #2. De la editorial Archaia nos llega la miniserie de cuatro números Butterfly. La historia es de Arash Amel, con guión de Marguerite Bennett y dibujo de Antonio Fuso. Historia de una joven espía con secreto familiar. Es un tebeo formalmente correctísimo, pero a estas alturas la premisa nos queda algo sobada. Tampoco Roche Limit #1 de Michael Moreci y Vic Malhotra para Image tiene una premisa innovadora: en una colonia espacial venida a menos y llena de mafiosos y corruptelas, una mujer busca a su hermana desaparecida y se encuentra con la inesperada ayuda de un canalla con encanto. Otro tebeo que no está mal, pero que tampoco es notable en nada. Comentamos también Pop #2 de Curt Pires y Jason Copland, que no consigue llevar a buen puerto ninguna de las premisas interesantes del primer número y sí en cambio estropear bastante la historia y contarlo todo de manera regulera. Sundowners #2 (Dark Horse) es un caso curioso. Por una parte lo que ocurre en el tebeo es bastante interesante, pero por otro lado se acaba gran parte del misterio planteado al principio, los personajes no acaban de desarrollarse bien y el final es de esos que te hacen negar con la cabeza un tanto resignado. Al menos Wayward #2 de Jim Zub y Steve Cummings nos ha parecido un tebeo interesante y bien hecho. Mezcla bien la cotidiano con lo sobrenatural y aunque la presentación de un personaje que se intuye importante para la colección es apresurada y un tanto torpe, al menos deja el camino allanado para que el tercer número pueda hacer avanzar la historia a un ritmo ágil.