Nos ha quedado un programa ecléctico pero en el que afortunadamente hablamos de obras que nos han gustado. Comenzamos con The Witcher, la estructuralmente curiosa, un tanto seca, pero no obstante muy estimable serie de Netflix. Luego repartimos buenas palabras para el anime Vinland Saga, que nos ha tenido interesados y fascinados por algunos de sus personajes desde el principio. La cuarta temporada de She-Ra se gana no solo nuestro aprecio sino también nuestra admiración con una temporada en la que no para de repartir sopapos a sus personajes, destrozar las dinámicas internas entre ellos y seguir avanzando en una loca carrera hacia destinos inescrutables. Shokugeki no Soma es lo siguiente de lo que hablamos. Una cuarta temporada excesivamente acelerada y centrada en un evento concreto que resta aire a los secundarios. Se deja querer, pero se la siente falta de tiempo. Y terminamos hablando de la tercera temporada de Psycho-Pass. Cambio de protagonistas, nueva trama enrevesada y los aciertos deseables combinados con los defectos habituales que lamentablemente no acaban de conseguir eliminar. Pero es un anime que nos gusta tanto que tragamos con sus problemas sin demasiada dificultad.
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