Esta semana venimos variados y desatados. Avisamos. Primero, la actualidad de Infinity. Avengers #19 nos acerca un poquito a los misteriosos Constructores mientras los héroes discuten muy fuerte cual va a ser su muy desesperado paso siguiente en esta guerra que se ha torcido muy rápido. Hickman y Yu se marcan un número de transición y contexto interesante aunque no especialmente espectacular. Battle of the Atom alcanza su tercera entrega en X-Men #5 a cargo de Wood y López. Scott y Jean huyendo como alma que lleva el diablo mientras todo el mundo inicia una operación de búsqueda y captura. Buena dinámica de personajes y narrativa visual impecable. Dynamite se nos descuelga esta semana con el inicio de la miniserie Kings Watch, que reúne a El Fantasma, Mandrake y Flash Gordon en una trama todavía por ser desvelada. Jeff Parker le da empaque al guión y Marc Laming el toque justo entre lo pulp, lo oscuro y lo actual, sin sobresalir en nada, pero sin meter la pata. Aprovechando Infinity, Marvel relanza Mighty Avengers de Al Ewing y Greg Land, donde se juntan por azar un grupo variopinto de segundones comandados por Luke Cage y con un enfurruñado Superior Spider-Man en sus filas. Y Justice League 23.2 sirve como número 1 para una supuesta colección de Lobo con un cómic en el que parece ponerse en duda la identidad del rajado antihéroe. En La Noticia Chorra de la Semana, Didio ha dicho que Batwoman no tiene derecho a una vida personal feliz y que además su compromiso de lucha contra el crimen le impediría tener una relación estable y duradera. Y Marvel anuncia Origin II, una secuela que retomará la historia donde acabó el cómic que contaba el origen de Lobezno. Esta vez cambian al escritor original Paul Jenkins por Kieron Gillen y al dibujante Andy Kubert por su hermano Adam.
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