The
Following da una vuelta de tuerca al viejo planteamiento del policía
acabado que debe volver al servicio activo para atrapar a un asesino en
serie al que ya detuvo en su momento. Kevin Bacon debe combatir al
grupo de seguidores de James Purefoy, un profesor sangriento con fijación por Alan Poe. El duelo interpretativo entre Bacon y Purefoy promete ser lo mejor de
la serie, que se prevé una sucesión de casos episódicos en los que Bacon
tendrá que detener al copycat de turno. Pero los actores son de recibo,
la factura técnica notable y el piloto cumple con el objetivo de
presentar los personajes y dejarnos con ganas de más. Veremos.
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